Mi trayectoria personal hace que sienta especial resonancia con procesos de duelo por separación, necesidades de crecimiento personal, propósito de vida, acompañamiento a padres/madres y crisis vitales.
Nos comunicamos con el lenguaje del corazón, ese que intuye que puedo ser, sin pretensiones, un compañero del alma durante una etapa de tu camino. Si así lo sientes, lo haré con humildad y con el anhelo de acompañarte en el camino de vuelta a casa.
En las noches oscuras del alma que tod@s transitamos a veces es necesario tener un faro que ayude a navegar en medio de la tormenta.
Tod@s somos faro y navegante a lo largo del camino.