Estoy en el Camino, en el de la Vida, con mi mochila a la espalda cargada de vivencias…
Me descubrí ante una vida incompleta, en la que no encontraba fuerzas para caminar. Vivimos como la persona que creemos ser, nuestra personalidad se gesta aprendiendo y respetando los patrones que desde niños nos enseñan. Y ocurre que un día, ya no nos reconocemos, ocultos tras un disfraz, una identidad que nos confunde.
Ese momento en el que el mundo se hunde bajo los pies… es el momento del reencuentro con nosotros mismos
Un camino de CRECIMIENTO Y DESARROLLO de la mano del Amor, permitiendo lo que trae cada momento. Desde mi experiencia vital y espiritual aquí estoy. Para acompañarte en el Camino…”