Encuentra a un ser que aúne la lucidez y la ternura, y camina junto a él.
Desde el momento en que se sigue a alguien se deja de seguir la verdad.
Yo hago lo mío y tú haces lo tuyo. No estoy en este mundo para llenar tus expectativas y tú no estás en este mundo para llenar las mías. Tú eres tú y yo soy yo. Y si por casualidad nos encontramos, es hermoso. Si no, no puede remediarse.